A “les enfants de la patrie” le han llegado de nuevo los días de gloria con el acceso a la presidencia de la República de un político de derechas, sin complejos, dispuesto a recuperar la “Grandeur” y con tres mensajes internacionales muy claros. La defensa de Europa y el europeísmo, su cercanía a EE.UU. y su idea de hacer un gran pacto con Africa.
Nicolas Sarkozy ha ganado las elecciones en Francia poniendo aún más de manifiesto el franco retroceso en el que se encuentran sumidas las políticas propugnadas por esa izquierda camaleónica, escurridiza y del canto de sirenas que representan entre otros Rodríguez Zapatero, en nuestro país, y Ségolène Royal en Francia.
Francia, en donde tengo buenos amigos –casi todos ellos partidarios de Sarkozy- ha decidido ponerse las pilas y recorrer el camino necesario para liderar de nuevo el mundo. Ya podemos correr nosotros (imposible en esta España de Zapatero que, por cierto, es el mayor gafe que les puede caer a los candidatos socialistas de otros países, como ya ha quedado demostrado) si no queremos que ese tren se nos ponga inalcanzable.
Para empezar, nosotros también tendríamos que plantearnos un gran pacto con Africa. Hemos de conseguir poner fin a las pateras y los cayucos de la muerte explorando soluciones en origen para quienes arriesgan lo único que tienen, la vida, en busca de un mundo menos tiránico. Hemos de acordar y apoyar el desarrollo de Africa y hemos de acordar las condiciones que garanticen la vida de esos inmigrantes y su recepción adecuada y prevista. Mientras gobierne Zapatero, los franceses también nos ganarán en eso.
El Sr. Sebastián, candidato del PSOE a la alcaldía que con excelente acierto en su gestión ocupa Alberto Ruiz Gallardón y en la que espero continúe después del 27-M para bien de los madrileños, ha prometido -¿os acordáis amigos blogueros del post “la zanahoria”?- ni una, ni dos, sino tres playas tres para Madrid. Si yo viviese y votase en Madrid, tengo claro que no estaría entre mis necesidades prioritarias contar con tres playas en la capital.
Como vivo en Aranjuez, sí me atrevo a pedirle al Sr. Sebastián, que utilice su cercanía a Zapatero para que plantee una solución de una vez por todas a la situación del río Tajo. La paralización del Plan Hidrológico del gobierno Aznar permite que en tres días el Ebro vierta al mar el agua que Madrid consume en un año, mientras en Aranjuez nuestro medioambiente (no existiría nuestra ciudad sin él) esté cada vez más comprometido por la escasa cantidad de agua que nos trae el Tajo.
Andan los socialistas algo nerviosos. No sé el motivo, aunque lo intuyo, pero si han decidido quitarle el alcanfor a Bono (el del helicóptero con 17 muertos en Afganistán) y pasearlo de nuevo por los mítines electorales, es porque las cosas no les pintan muy bien. Espero que en esta campaña no nos cuente muchas veces lo del carné de sindicalista de su padre. Ya aburre.
Hablando de sindicalistas, ha llegado a mis manos –me lo ha enviado el peor alcalde que ha tenido Aranjuez desde 1979, es decir, Dionisio- un libro sobre el movimiento obrero en Aranjuez. No he tenido oportunidad de leerlo aunque sí de pasar las hojas y, algún día con algo más de tiempo, daré mi opinión sobre distintos comentarios que tienen que ver con mi persona o sobre asuntos relacionados con el PP que, por vividos en primera persona, no he de consentir que sean manipulados de forma tan desfigurada y tendenciosa.
En Aranjuez, como siempre, bien aunque los socialistas que nos gobiernan quieren convencernos que en las obras que ellos realizan (solo en las suyas, ¡faltaría más!) 89 centímetros es lo mismo que 177 centímetros. Digan lo que digan no es lo mismo y si además son de altura de ladrillos la cosa es aún más escabrosa. Si eso se hace en un sitio que algún día albergará agentes de la autoridad, me parece que es ir quitándoles ya de antemano la autoridad.
Me comentaban hace poco que los socialistas del gobierno municipal de Aranjuez cuando estaban viendo los cambios que harían en el Escudo Municipal –por cierto el Cronista Oficial de la Villa, mi buen amigo José Luís Lindo, dará una conferencia sobre el Escudo de Aranjuez el viernes 18 en el Casino de esta ciudad, que seguro será muy interesante- comentaban algunos sobre la posibilidad de sustituir la Cruz de Santiago que figura en el mismo por un embudo. Me imagino que para dejar constancia de la ley por la que ellos se rigen. Al final no lo hicieron, aunque sí aplican dicha ley.
Los enfants franceses con su día de gloria y nuestros garçons de l'essence (los famosos chicos de la gasolina del innombrable Arzallus) a recibir fondos de nuestros impuestos para poder quemar más autobuses, cajeros y vidas.
Nicolas Sarkozy ha ganado las elecciones en Francia poniendo aún más de manifiesto el franco retroceso en el que se encuentran sumidas las políticas propugnadas por esa izquierda camaleónica, escurridiza y del canto de sirenas que representan entre otros Rodríguez Zapatero, en nuestro país, y Ségolène Royal en Francia.
Francia, en donde tengo buenos amigos –casi todos ellos partidarios de Sarkozy- ha decidido ponerse las pilas y recorrer el camino necesario para liderar de nuevo el mundo. Ya podemos correr nosotros (imposible en esta España de Zapatero que, por cierto, es el mayor gafe que les puede caer a los candidatos socialistas de otros países, como ya ha quedado demostrado) si no queremos que ese tren se nos ponga inalcanzable.
Para empezar, nosotros también tendríamos que plantearnos un gran pacto con Africa. Hemos de conseguir poner fin a las pateras y los cayucos de la muerte explorando soluciones en origen para quienes arriesgan lo único que tienen, la vida, en busca de un mundo menos tiránico. Hemos de acordar y apoyar el desarrollo de Africa y hemos de acordar las condiciones que garanticen la vida de esos inmigrantes y su recepción adecuada y prevista. Mientras gobierne Zapatero, los franceses también nos ganarán en eso.
El Sr. Sebastián, candidato del PSOE a la alcaldía que con excelente acierto en su gestión ocupa Alberto Ruiz Gallardón y en la que espero continúe después del 27-M para bien de los madrileños, ha prometido -¿os acordáis amigos blogueros del post “la zanahoria”?- ni una, ni dos, sino tres playas tres para Madrid. Si yo viviese y votase en Madrid, tengo claro que no estaría entre mis necesidades prioritarias contar con tres playas en la capital.
Como vivo en Aranjuez, sí me atrevo a pedirle al Sr. Sebastián, que utilice su cercanía a Zapatero para que plantee una solución de una vez por todas a la situación del río Tajo. La paralización del Plan Hidrológico del gobierno Aznar permite que en tres días el Ebro vierta al mar el agua que Madrid consume en un año, mientras en Aranjuez nuestro medioambiente (no existiría nuestra ciudad sin él) esté cada vez más comprometido por la escasa cantidad de agua que nos trae el Tajo.
Andan los socialistas algo nerviosos. No sé el motivo, aunque lo intuyo, pero si han decidido quitarle el alcanfor a Bono (el del helicóptero con 17 muertos en Afganistán) y pasearlo de nuevo por los mítines electorales, es porque las cosas no les pintan muy bien. Espero que en esta campaña no nos cuente muchas veces lo del carné de sindicalista de su padre. Ya aburre.
Hablando de sindicalistas, ha llegado a mis manos –me lo ha enviado el peor alcalde que ha tenido Aranjuez desde 1979, es decir, Dionisio- un libro sobre el movimiento obrero en Aranjuez. No he tenido oportunidad de leerlo aunque sí de pasar las hojas y, algún día con algo más de tiempo, daré mi opinión sobre distintos comentarios que tienen que ver con mi persona o sobre asuntos relacionados con el PP que, por vividos en primera persona, no he de consentir que sean manipulados de forma tan desfigurada y tendenciosa.
En Aranjuez, como siempre, bien aunque los socialistas que nos gobiernan quieren convencernos que en las obras que ellos realizan (solo en las suyas, ¡faltaría más!) 89 centímetros es lo mismo que 177 centímetros. Digan lo que digan no es lo mismo y si además son de altura de ladrillos la cosa es aún más escabrosa. Si eso se hace en un sitio que algún día albergará agentes de la autoridad, me parece que es ir quitándoles ya de antemano la autoridad.
Me comentaban hace poco que los socialistas del gobierno municipal de Aranjuez cuando estaban viendo los cambios que harían en el Escudo Municipal –por cierto el Cronista Oficial de la Villa, mi buen amigo José Luís Lindo, dará una conferencia sobre el Escudo de Aranjuez el viernes 18 en el Casino de esta ciudad, que seguro será muy interesante- comentaban algunos sobre la posibilidad de sustituir la Cruz de Santiago que figura en el mismo por un embudo. Me imagino que para dejar constancia de la ley por la que ellos se rigen. Al final no lo hicieron, aunque sí aplican dicha ley.
Los enfants franceses con su día de gloria y nuestros garçons de l'essence (los famosos chicos de la gasolina del innombrable Arzallus) a recibir fondos de nuestros impuestos para poder quemar más autobuses, cajeros y vidas.
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