miércoles, 25 de noviembre de 2009

Cee


Soy gallego, ya lo sabéis. Es cierto que mi corazón está entusiasmado –que no dividido- entre mi tierra madre y Aranjuez, hasta el punto de que me considero un ribereño –así nos llaman a los de Aranjuez, mi maravillosa ciudad- gallego. Y no es amigos blogueros por ejercer de gallego y evitar que sepáis si subo o bajo, sino sencillamente porque me considero un ribereño gallego.

Quizá por esa condición –de la que me siento muy orgulloso- es fácil que me quede prendado e incluso algunas veces enganchado con algunas noticias que se refieren a Aranjuez o a Galicia, o será quizás porque las noticias son tan llamativas que enganchan a cualquiera que las conozca, o no.

La verdad es que Galicia, los pescadores gallegos para ser más exactos, ha estado y sigue estando de triste actualidad a causa de la experiencia traumática y surrealista vivida en torno al secuestro y posterior liberación del Alakrana. Al delito del secuestro, el Desgobierno de Zapatero contesta con el delito del pago del rescate. Son vidas de españoles –gallegos y vascos- que había que salvar, pero su liberación ha puesto encima de la mesa la inseguridad jurídica que nos rodea.

Si el gobierno de España –incluida la Cataluña que Montilla y compañía pretenden quedarse por el morro- paga o ayuda a pagar el rescate por un secuestro sin que a continuación se pongan todos los medios para detener a los corsarios –sí, corsarios, con los importantes matices que los diferencian de los piratas- y someterlos a los tribunales de justicia, eso es inseguridad jurídica.

Si los dos corsarios detenidos inicialmente y trasladados a España por orden y deseo expreso del inefable Garzón son objeto de trato distinto y juicio más rápido del que tenemos los que pagamos los impuestos en España, eso es inseguridad jurídica. Eso sin tener en cuenta el cachondeo vivido en torno a la indescifrable mayoría de edad del denominado Willy y la cantidad de dinero gastado –dinero del contribuyente, por supuesto- en pruebas que determinasen su supuesta edad. Que digo yo que la cosa se hubiese determinado rápidamente si le hubiesen mirado los cojones al tal Willy. ¿No los tuvo para participar en el abordaje y secuestro del Alakrana? Pues ¡hala!, que los tenga también para ser juzgado y condenado.

Si el Desgobierno - a través de “expertísimos” agentes del CNI- paga un millón de dólares a un supuesto representante de los piratas que se queda con la pasta y nada tiene que ver con los piratas ni con el secuestro, mientras la pacifista Chacón nos dice que tienen perfectamente localizados a los tres marineros que habían sido trasladados a tierra –que en realidad no fueron nunca trasladados a tierra, por lo que la ministra no tenía ni puñetera idea de la suerte que estaban corriendo los marineros, o lo que es lo mismo, nos estaba tomando el pelo al tiempo que jugaban con la vida de los pescadores- eso es inseguridad jurídica (y física).

Y sobre este asunto -del que algún día escribiré con algo más de detenimiento- lo más lamentable es la inseguridad que para el futuro han creado Zapatero y la pandilla de incapaces que le hacen el coro a diario desde el gobierno. ¿Quién será el próximo secuestrado?

Hoy quería hablar de Galicia y al final me he enrollado con el Alakrana, los corsarios y los fuleros, pero no quiero terminar sin centrar la mirada en Cee, en la Costa de la Muerte.

Cerca de allí he compartido horas y horas de conversación con Moura, mi extraordinaria amiga Meiga. Conversaciones sobre el mar y la tierra, sobre lo divino y lo humano, sobre el tiempo y el espacio, sobre lo que no existe y lo que no es y muchas, muchas veces, sobre la vida y la muerte y la poderosa coexistencia de ambas en el vivir cotidiano de los gallegos.

Ayer, al darse a conocer la noticia por los medios de comunicación, vino a verme. Dejó por unos instantes su presencia al borde de los acantilados en los que la Costa de la Muerte bebe del Atlántico las historias de vidas que este inmenso mar cobija en sus olas, y vino a hablarme del muerto desaparecido en el cementerio de Cee. Me hablaba entre risas por lo que de comedia del tres al cuarto tiene lo ocurrido y los pormenores que lo rodean. Desaparece un muerto del nicho en el que fue sepultado –incluida la caja- justo cuando se va a tomar una muestra del cadáver para determinar si el ADN de un recién llegado al pastel de la herencia coincide o no con el suyo. Y además el cura que lo enterró –me imagino que el secreto de confesión le está tapando la boca- dice algo tan simple como que posiblemente haya cambiado de nicho –el muerto- y que la silicona blanda, por reciente, seguro que puede dar buenas pistas.

Vamos, que ni Meigas, ni conjuros, ni ritos de descerebrados. Blanco –no el friki- y en botella.

Curiosamente el Ministro de Justicia –que ha engordado desde que llegó al ministerio- es de Cee. No digo yo que tenga nada que ver con lo del muerto desaparecido –ni que no tenga- pero sí hago la salvedad de que igual que se puede cambiar a un muerto de nicho –pensemos en cómo han de ser quienes hayan hecho el cambio- aquella tierra es capaz de lanzar al mundo un ser como Caamaño. Según el parecer de este defensor de la imposición del gallego a los gallegos, no hay que perder de vista que el Estatuto de Cataluña fue aprobado por la mayoría de los representantes de los españoles. ¡Qué torticero el ministro! Pretende dar por válido lo que la propia Constitución exige que sea aprobado por una mayoría cualificada superior a la mayoría absoluta de la Cámara, es decir la modificación de la Constitución.

Según su teoría, que no busque al muerto desaparecido. La mayoría de los asistentes a su entierro dirán que lo metieron en el nicho que tienen su nombre grabado en la lápida y por lo tanto ¡ahí tiene que estar el muerto! Además, si el Desgobierno de Zapatero, con este prosélito ministro encargado de la Justicia entre ellos, nos tienen sumidos en la más absoluta inseguridad jurídica, no creo que se pongan a garantizar el descanso de los muertos, o sí.

martes, 24 de noviembre de 2009

La Pompeu Fabra


El circo montado por los socialistas –al servicio de Zapatero- el pasado domingo puede ser preocupante –o no- despilfarrador –o no- y ridículo –o no- sobre todo si tenemos en cuenta que el show se lleva a cabo en una situación política complicada, fundamentalmente por los elementos ajenos a la cordura y el respeto a los ciudadanos introducidos por Zapatero y sus voceros en la cotidianeidad política de nuestro país, y en una situación económica que parece desaconsejar este tipo de gastos tan exagerados como innecesarios. Además, ver a los socialistas españoles imitando el más puro estilo yanqui en un acto de su partido, teniendo como tenemos grabada en nuestra retina la imagen de ZP sentado al paso de la bandera de EEUU, es para revolcarse por el suelo de la risa, o de pena.

No voy a comentar los sentimientos que me inspiran imágenes como las de Felipe González y Rodríguez Ibarra entrando a ritmo de jazz en una historia que a ellos –además de mayorcitos- les pilla ideológicamente lejana, ni por supuesto me entretendré en aconsejarle a la ViceVogue, no seré yo el niño que en la fiesta le diga –al igual que en el cuento del rey desnudo- que va hecha un cromo, prefiero que los necios sigan dejándola pasearse con esa imposible estética que la acompaña permanentemente.

Lo que más me llama la atención de la ocurrencia de los socialistas fueron las palabras de Zapatero. Hay un dicho en nuestro país –que lo quiera o no aún sigue siendo el de Montilla y sus escapistas socios del gobierno catalán- que asevera que la excepción confirma la regla. Posiblemente con Zapatero estemos ante esa excepción.

Científicos de la Universidad Pompeu Fabra han realizado un estudio por el que concluyen que las personas traducen sus ideas en palabras en 200 milisegundos, pero que tardan algo más -700 milisegundos- en pronunciar el término. Este desfase –imposible de medir con un reloj de pulsera, así que no perdáis el tiempo amigos blogueros en comprobarlo, que con que lo haga el friki Pepiño, que seguro lo hará al leer la noticia, ya llega- dicen que es debido a que desde que se localiza el término hasta que se pronuncia hay muchos procesos cerebrales –buscar la palabra, buscar el sonido, articular el término…- que justifican esta diferencia de tiempo.

Independientemente de la importancia de estudios de este tipo pueden tener en la comprensión y posterior tratamiento de determinados trastornos del lenguaje, nos viene bien a nosotros para explicar la importancia de las palabras de Zapatero en el espectáculo americano de los socialistas el pasado fin de semana. Zapatero es la excepción que confirma la regla. Zapatero, a diferencia de lo concluido en el estudio de la Pompeu Fabra, tarda solo 200 milisegundos en pronunciar los términos y por el contrario emplea 700 milisegundos en traducir sus ideas en palabras.

Dicho de manera más vulgar, Zapatero la va cagando al hablar, porque cuando consigue saber lo que quiere decir, ya ha dicho otra cosa, la que primero le ha llegado a la boca. No lo hace a mal, sencillamente es la lamentable excepción de la regla.

jueves, 19 de noviembre de 2009

Los antisistema


Blanco –no el friki- y en botella. Lo de Trolalcaba ayer no deja lugar a ninguna duda sobre la utilización que Rubalcaba hace de SITEL y sobre las poco piadosas intenciones que tiene hacia Floriano, el diputado extremeño del PP que, en presencia de González Pons, escuchó atónito las amenazas y advertencias de ese engañabobos que dirige el ministerio que tendría que dedicarse a defender nuestras vidas, nuestra intimidad, nuestro derechos y a lo que se ve, está a otros menesteres.

De lo contado por los medios de comunicación, son destacables bajo mi punto de vista dos aspectos. En primer lugar el histerismo y los malos modos de que hizo gala Trolalcaba –buena muestra de ello es la fotografía que ilustra la noticia en La Gaceta http://www.intereconomia.com/noticias-gaceta/politica/sitel-saca-quicio-rubalcaba- poniendo de manifiesto el nerviosismo que le carcome ese retorcido corazón de madera, y en segundo lugar el dominio de sí mismos que tuvieron Floriano y González Pons al no cruzarle la geta a Trolalcaba ante los insultos recibidos.

Es el mismo Trolalcaba que no se merecía un gobierno que le mintiese –y para no sentirse mentido entró a formar parte de la gran mentira que están suponiendo Zapatero y compañía- y que ocho años antes callaba como un putas ante las insanas actuaciones del Gobierno de los GAL. Su actuación de ayer –seguro que las mejorará en el futuro inmediato- nos muestra con bastante claridad el punto de desazón que ha alcanzado el gobierno de ZP.

Son tantos los frentes abiertos, han engañado y humillado a tantos millones de españoles, han utilizado el Estado de una manera tan torticera, tan sucia, tan siniestra, nos han sumido en tal situación de ruina, han deteriorado hasta tal punto la normal convivencia de los ciudadanos de España, han hecho que se mofen de todos nosotros de tal manera en el ámbito internacional, nos han tomado tantas veces por tontos, que ya no hay Trolalcaba, ni ViceVogue, ni SITEL, ni Pumpido, ni friki, ni titiritero, ni subvención que pueda detener el estacazo que se van a dar.

Estamos ante el gobierno de los antisistema. Este es el gobierno que más ha empujado a los ciudadanos a convertirse en antisistemas. Parece que todas sus actuaciones, todos sus mensajes, sus gestos y engañifas iban y van encaminadas a echarnos fuera, a hacernos desconfiar de la justicia, de las fuerzas de seguridad del Estado, de los maestros, de nuestros padres y nuestros hijos. Esfuerzos encauzados a situarnos fuera, enfrente de aquello en lo que creíamos hasta ahora. Los antisistema no han tenido mejor aliado en estos últimos años que Zapatero y su gobierno, nadie les ha hecho mejor proselitismo que Zapatero, la ViceVogue, Trolalcaba

No parece que la cosa pueda ir mucho más lejos. Yo que Rajoy calentaría motores para tener las cosas claras y dispuestas para el próximo verano. Es lo que le queda a este gobierno. Zapatero ya solo aspira al acontecimiento planetario anunciado por Leijín. Lo necesita para su currículo, para cuando pretenda ser elegido Presidente del Mundo (de los mentecatos).

viernes, 13 de noviembre de 2009

El revoltijo


Vaya revoltijo de país. ¿No tenéis amigos blogueros la sensación –no siempre, pero por lo menos 363 días al año- de que la habitación está puesta al revés? ¿Qué a qué habitación me refiero?, al mundo, está claro. Es como si le hubiesen dado la vuelta hacia adentro, es decir, como si a un balón le pones la parte de los pentágonos por dentro, suponiendo que la parte de los pentágonos fuese la superficie exterior del balón –que viendo cómo están las cosas, es mejor explicarlo todo- y nosotros que habitualmente caminamos –o nos caemos- por esa superficie, ahora estaríamos caminando por el interior, con los pies pegados a lo que antes era la superficie exterior, que ahora se habría convertido en el techo interior del que estaríamos suspendidos, como si lo pisásemos, gracias al efecto que la presión existente dentro del balón ejercería sobre nosotros. Presión que no sólo evitaría que nos cayésemos todos al centro del balón, sino que nos mantendría pisando sobre la cara interna del balón –el mundo- que sería al mismo tiempo el techo del interior del balón.

¿Qué? ¿Cómo os ha quedado el cuerpo? Pues así es como anda el país.

Para empezar, el cara dura y sanguinario De Juana Chaos dice que está deprimido y que no puede venir a España. Es más, sus abogados alegan que volver a España le causaría deterioro de su salud y mermaría su esperanza de vida. ¡Pobrecito, qué pena, está malito! En ese sentido sus víctimas, los inocentes que él asesinó están mejor ya que no tienen depresión ni pueden ver mermadas sus esperanzas de vida. Claro, no la tienen y por lo tanto no puede mermar. Hombre, viéndolo así lleva razón el valiente Iñaki. Bueno, a lo mejor podríamos llegar a un acuerdo. El no viene a España –de momento- a cambio de que todos los días lo lleven hasta Hendaya, como si lo fuesen a trasladar a Madrid, y cuando empiece a sudar –con ese sudor frío que los cobardes tienen antes de irse por la patita abajo- en el momento en que empezase a gimotear, de vuelta a su casa. Así todos los días hasta que se le pase la depresión, que yo no le quiero ningún mal. No me gustaría que se mermase ni un solo día de su vida si viviéndola puede llegar a sentir por él mismo la repugnancia que sentimos millones de españoles. Pero si no hay acuerdo, que lo traigan ya a España, que no le permitan reírse ni un segundo más de las víctimas, sus familiares, la justicia y el conjunto de los ciudadanos que asistimos indignados a este denigrante folletín.

Dentro del balón también están los responsables del Consejo de la Juventud de Extremadura con su presidenta a la cabeza. No vendría mal que en vez de gastarse los cuartos –nuestros cuartos- en el cursito de marras se los gastase en comprar diccionarios. Acusa a los medios de comunicación de manipulación, olvidándose de que quienes realmente están por la manipulación ilustrada son ellos, los del Consejo de la Juventud. Es la primera acepción que aparece en el diccionario: “Manejar cosas, especialmente objetos delicados o de precisión”. ¿Acaso no es eso lo que les van a enseñar a los jóvenes que asistan al curso? Por lo tanto la manipulación –al igual que el placer- estará en sus manos. Por cierto, que para terminar con los juegos de palabras, Manos Limpias ha denunciado al Consejo de la Juventud. Hombre, aquí está claro que en principio, un cierto riesgo de que se ensucien las manos sí existe, por lo que Manos Limpias tiene a priori motivos para la denuncia.

Y hablando de diccionarios, ¡marchando uno de español! para el diputado de CIU que ayer en el Congreso gritaba a la Presidenta de la Comisión ¡”No me hable de excomulgación”! Se ve que en catalán dicen comulgación en vez de comunión. Visto lo visto, uno empieza a explicarse lo de que paguen 1000 euros por una traducción de veinte minutos del español al catalán –o viceversa- para atender a una delegación de Nicaragua. Si no saben, no saben.

Podríamos seguir así amigos blogueros días y días y no terminaríamos de relatar y comentar este balón vuelto. Sería entretenido y hasta divertido si no fuese porque entre chanza y chanza nos vamos jugando muchísimas cosas. Entre chanza y chanza lo del Alakrana es un disparate o la puesta en libertad de uno de los cómplices del asesino de Marta del Castillo no puede sino indignarnos.

En Aranjuez, mi maravillosa ciudad, el alcalde Dionisio sigue adelante con su errática obra en la calle del Rey pese a tener una orden de paralización del Director General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid. Dice el concejal de urbanismo -¿dónde los buscarán?- que el Director General de Urbanismo no es más que el Alcalde. ¿Será posible que alguien así esté dirigiendo el urbanismo de esta ciudad? No es una cuestión de ser más o menos que otro. Es una cuestión de competencias pero está visto que estos socialistas que nos desgobiernan en Aranjuez de lo único que saben es de incompetencias. Nos las demuestran a diario.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Pasta dura


El cartón piedra es una pasta de cartón o papel, yeso y aceite secante que llega a alcanzar una dureza importante. Actualmente el cartón piedra se utiliza fundamentalmente en la realización de máscaras y figuras de todo tipo, teniendo su máximo y más conocido exponente en las famosísimas figuras de las fallas valencianas, los ninots.

Sin embargo este material ha sido utilizado durante años en la construcción y en la fabricación de muebles y juguetes. Paredes forradas de cartón piedra que actuaba como aislante térmico y acústico, traseras de muebles y fondos de cajones y –los que recordéis esto ya tenéis unos añitos- fuertes de soldados americanos para protegerse de los ataques de los comanches o los apaches con Toro Sentado a la cabeza, en los que el suelo era de cartón piedra. Un uso muy extendido durante años, muchos años, pero hace años, muchos años.

Hablando de política con un gran amigo –siempre terminamos hablando de política- me trasladó un pensamiento que no es desdeñable –ninguno lo es, de nadie- que establecía una relación directa entre el cartón piedra y el comportamiento de la izquierda oficial que nos desgobierna en el país. Creo que lleva razón. Zapatero, al igual que sus voceros –dicho esto con acento del otro lado del charco- es y se comporta como un muñeco de cartón piedra. Es como si sus planteamientos, ideas, discursos, se hubieran quedado anclados en los finales del XIX, principios del XX. Cuando hablas con ellos, es lo mismo que si estuvieses hablando con un muñeco de cartón piedra.

No te mates en razonamientos, argumentaciones o reflexiones. Ellos sencillamente no escuchan porque son de cartón piedra. Se mueven y mueven sus labios para emitir grabaciones de discos –rayados ya por el tiempo y el mal uso- en las que siempre dicen lo mismo, con el mismo tono, con las mismas cantinelas demagógicas y ancladas en el principio de los tiempos.

Probad amigos blogueros a mantener una conversación ideológica con ellos. Os daréis cuenta de que su bla, bla, bla es constante. La solidaridad, la colectividad, el interés público, las políticas sociales, la igualdad, los derechos de los trabajadores, las nacionalizaciones, las subvenciones, la derechona… ¿No os parece estar escuchando al friki Pepiño? Da igual el tema de conversación, ellos tienen que soltar siempre el mismo discurso, venga o no venga a cuento. Hoy, en noviembre del 2009, sus cuerdas vocales emiten las mismas palabras que Marx, Engels, Fourier o Saint Simon. Son, como decía mi amigo, inertes seres de cartón piedra ajenos al mundo en el que vivimos y lo que es peor, ajenos a los problemas y necesidades reales que tenemos las personas que vivimos hoy en ese mundo. Eso explica el constatado y constatable hecho de que Zapatero y su gobierno –y me temo que la mayoría de dirigentes que le acompañan en su partido- va por un lado en sus discursos y sus hechos y este país va por otro.

Un repaso rápido por Zapatero y aquellos que son sus mejores amigos en el escenario internacional nos sitúa claramente en el mundo del cartón piedra. El propio ZP, Gorila Rojo Chávez, Evo Morales, Raúl y Fidel Castro, Mahmud Ahmadineyad… no hace falta seguir ¿verdad? Todos ellos tienen muchas cosas en común pero hay una destacable sobre las demás. El rostro tan duro que tienen. ¿Lo veis amigos blogueros? Lo que decía mi amigo, el cartón piedra.

martes, 3 de noviembre de 2009

Titiriteros de España


El Consejo de Ministros –me imagino que esta expresión no tendrá nada que ver con la calidad que sus componentes tienen para dar consejos, sobre todo viendo la que está cayendo- aprobó el pasado viernes el cambio de nombre de la Biblioteca Nacional. A partir de ahora se llamará Biblioteca Nacional de España “para una mejor identificación en los foros y organizaciones internacionales”. Ja,ja,ja.

La carcajada –como ya habréis adivinado amigos blogueros- no forma parte ni de la noticia ni del acuerdo del Consejo de Ministros. Es mía y os puedo asegurar que me sale del fondo del alma.

Así, a simple vista, tendríamos que sentirnos contentos ya que el Gobierno de Zapatero parece que está por hacer presente en los foros internacionales el nombre de nuestro país. Podríamos pensar que –como españoles que son- se sienten orgullosos de pasear el nombre de nuestro país por el mundo adelante, mas tengo la sensación de que nada está más lejos de la realidad en los motivos que han llevado al Gobierno –me imagino que a propuesta de la ministra de los titiriteros- a indicar el ámbito de representación de la mencionada institución.

Mucho me temo que la decisión obedece más a prebendas nacionalistas, posiblemente relacionadas con el apoyo que esos paletos han otorgado a Zapatero para aprobar los más disparatados y engañosos Presupuestos Generales del Estado. Y si no fuese así –que será- posiblemente la tontuna que obnubila permanentemente a ZP haya sido la causa.

¿Cómo van a consentir los chupópteros que la de España se llame Biblioteca Nacional, a secas? Porque a la de ellos también quieren llamarla Nacional. Biblioteca Nacional la de los catalanes, Biblioteca Nacional la de los vascos, Biblioteca Nacional la de los baleares…así que aquí a identificarse todo el mundo. A partir de ahora Biblioteca Nacional de España, Biblioteka nazionalak euskadi-tu nuen, Biblioteca Nacional dels paises catalans…

Este Zapatero ya ha demostrado a lo largo de los eternos años –si no lo son a muchos millones de ciudadanos nos lo parecen- que lleva instalado en la presidencia de nuestro país, que no da puntada sin hilo.

Le pasa lo mismo -sin ningún ánimo de establecer comparaciones que ya sabemos resultan siempre odiosas- que a los titiriteros. Hoy, tras la muerte de José Luis López Vázquez, ese grandísimo actor y gran caballero, se pone más que nunca de manifiesto la enorme diferencia existente entre los grandes señores de escena de nuestro país –como es el caso del inolvidable López Vázquez- y la pandilla de titiriteros subvencionados para mayor gloria de la ceja de ZP. Mi humilde y cariñoso homenaje a José Luis López Vázquez desde este espacio en la red. Los que ya tenemos una edad, aún conservamos el admirable recuerdo de su interpretación en la obra teatral Equus de Peter Shaffer allá por 1975. ¡Inolvidable!

¿Os habéis fijado amigos blogueros en el vocabulario que utilizan estos amigos de las subvenciones en función del interés último que tengan?

Sin ir más lejos la semana pasada se reunieron el autodenominado “mundo cultural” -¿cabe mayor presunción?- con los profesionales de la cosa laboral liberada para soltar unas cuantas peroratas y llamar a la manifestación contra los empresarios, que ya sabemos todos que los empresarios a lo único que se dedican es a explotar a los trabajadores y a forrarse de cuartos. Es más, teniendo titiriteros y cándidos y toxos no sé para qué queremos a los empresarios. Quienes realmente saben cómo ganar dinero, como medrar sin pegar chapa son ellos. Si ellos nos cuentan su método, todos vivimos bien, todos ganamos dineros y los empresarios sobran. Bueno, pues poco más o menos estaban en estas los titiriteros y compañía, utilizando las habituales expresiones relacionadas con la solidaridad, las políticas sociales, el bien público, el protagonismo de los ciudadanos, bla, bla, bla, pero de España nada. Es decir, que la palabra España no salió de los labios de ninguno/ninguna de ellos/ellas.

Cambiemos por un momento de escenario amigos blogueros, pero manteniendo a los titiriteros como protagonistas. Cuando les oímos hablar de música española, teatro español, cine español, literatura española… ¿cuándo es, os acordáis? ¿Cuándo hablan de España? ¡Eso es, exacto! Cuando están pidiendo la subvención. Entonces sí tenemos que subvencionar al cine español, al teatro español, al “mundo cultural” español en definitiva, porque entonces sí son de España. Titiriteros al fin y al cabo.

domingo, 1 de noviembre de 2009

La patria potestad


La “patria potestad” es el conjunto de derechos y obligaciones que la ley reconoce a los padres sobre las personas y bienes de sus hijos mientras estos son menores de edad. Los poderes públicos, a través de procedimientos judiciales pueden privar de la patria potestad a los progenitores.

Os preguntaréis amigos blogueros que a santo de qué esta forma de empezar hoy mi post. Bueno, pues aunque no lo parezca, está en relación directa con la tropelía que Zapatero y compañía van a llevar adelante con la nueva Ley del Aborto.

No voy a entrar hoy –aunque siempre es buen momento para argumentar en defensa de la vida, sobre todo de los más indefensos, los más débiles, los que aún están por nacer- a hablaros de lo que me parece este despropósito de Zapatero y de todos aquellos que le hacen la ola ante este nuevo envite contra la vida.

No voy a entrar hoy a analizar la empanada mental que tienen quienes critican la muerte de indefensos niños en las guerras que a diario nos cuentan en televisión –incluida la de Afganistán, que ya estoy hasta los mismísimos de que no llamemos a las cosas por su nombre- y aplauden el asesinato legal de los aún por nacer. No alcanzo a entender la diferencia que verán en las caras infantiles de unos y otros ni el mayor sentimiento de amparo que les inspiren unos sobre otros.

No voy a entrar a recordar ahora –son tan terribles, tan horrorosas, que difícilmente se nos podrán olvidar- las imágenes de esos verdaderos mataderos de inocentes niños en los que sus cuerpos arrancados a la vida que ya tenían en el vientre de sus madres, eran triturados al igual que la carne picada que usamos para hacer los filetes rusos o tirados al cubo de la basura en algunas clínicas abortistas en las que chulearon la ley para matar impunemente.

Hoy amigos blogueros quiero haceros una pequeña reflexión como padre que soy. La mayoría de edad en nuestro país está establecida en los 18 años. Hasta ese momento nuestros hijos están bajo nuestra tutela, para lo bueno y para lo malo. Hasta ese momento la legislación nos impone una serie de obligaciones para con ellos al mismo tiempo que nos otorga una serie de derechos, encaminados a su mejor educación y formación como personas.

Es decir, como padres tenemos la obligación –la vocación se nos sobreentiende- de alimentarlos, vestirlos, controlar que asistan al centro escolar, atender a las distintas campañas sanitarias de vacunaciones y prevención de distintas patologías, así como velar por que reciban la adecuada asistencia sanitaria en caso de enfermedad…y un larguísimo etcétera imposible de relatar en un post, ni en dos, ni en tres.

Precisamente para que podamos atender a esas obligaciones, la ley nos otorga una serie de derechos que nos permiten incidir a través de la pertinente autorización en el mejor desarrollo de sus vidas en tanto en cuanto sean menores de edad.

Vale, pues estamos en el punto en el que Zapatero y compañía nos quitan sin el correspondiente proceso judicial la patria potestad sobre nuestras hijas en el supuesto de que tengan 16 años y quieran abortar.

O sea, que Zapatero puede disponer de mi patria potestad a su antojo cuando le venga en gana. Mucho me temo que eso no puede ir así, solo. Si me retira la patria potestad sobre mis hijas menores de edad en el tema del aborto, primero es una ilegalidad y en segundo lugar, si me la quita tendrá que asumirla él ¿no?

Venga, pues ya se está levantando para llevarla mañana al médico, que está con la garganta un poco colorada –en casa rojo no tenemos ni el tomate frito- y a la vuelta que se pase por el colegio, que tiene que pagar las actividades extraescolares de este mes y además organizarse con los otros mapadres del AMPA para ver quienes llevan al equipo a jugar al balonmano el domingo, que esta semana les toca partido fuera de casa y hay que llevarlas en coches. Por la tarde ya se encargará mi hija de recordarle que necesita comprar un chándal y unas zapatillas –te vas a enterar ZP de lo que cuesta vivir en tiempos de crisis- y que le tiene que dar dinero para comprar el regalo de una compañera que está de cumple…

Eso, o rebajan la mayoría de edad a los 16 años. Pero si están pensando en poner la enseñanza obligatoria hasta los 18, no pueden rebajar la mayoría de edad, y si no la rebajan, Zapatero va a tener un problema muy gordo, porque mis hijas tienen que comer todos los días y digo yo que no se le ocurrirá a ZP discriminar a las mías en relación con las suyas; es decir que comerán en el comedor familiar de La Moncloa y, mira tú por dónde, las mías no quieren saber nada de las “góticas”. Vamos, que no las soportan, así que ese comedor se puede convertir en un infierno desde mañana mismo.

Zapatero tiene un problema con mis hijas y otro con él mismo. Lo de mis hijas tendrá alguna solución pero lo de él me temo que la solución no le va a gustar. Se tiene que ir a su casa y dejarnos tranquilos a los españoles.

No sé cuantos de vosotros amigos blogueros tendréis hijas que se puedan ver afectadas por esta decisión, pero me parece que –bromas aparte- la patria potestad no es algo que Zapatero nos pueda quitar a su antojo. Las leyes también están para protegernos a nosotros, no solo a los delincuentes.