lunes, 14 de abril de 2008

Continuista


Ya tenemos nuevo gobierno. Como era de esperar –viniendo de RE- hay de todo como en botica. Quizá lo más sorprendente es la continuidad de algunos ministros que han destacado en su anterior etapa por su mala gestión, o por su carácter conflictivo o por ambas cosas a la vez. Bermejo, Maleni y Moratinos son claros ejemplos de lo que digo. Con todo, para mi la más sorprendente y frustrante es la del broncas Bermejo. Su presencia en el Gobierno de España permite entender con meridiana transparencia que RERodríguez Embustero- lejos de buscar escenarios y actitudes que permitan el encuentro con el PP en determinados asuntos de Estado, se ha reservado en su gobierno a quienes harán imposible ese entendimiento.

¿Acaso alguno de vosotros amigos blogueros sois capaces de imaginaros acuerdos con Bermejo en materia de justicia? El matón del barrio nunca ha propiciado acuerdos, sino que ha impuesto –en la medida en que no se le ha hecho frente- su capricho y su ley. ¿Por qué iba Bermejo a ser distinto?

Para demostrarnos que algo ha cambiado, como Notario Mayor del Reino podía empezar por dar fe de la inmensa patraña que RE nos ha contado con el asunto de los trasvases. Está claro que cerca de once millones de españoles están dispuestos a tragar con las trolas y embustes del presidente RE, pero quienes no hemos admitido la mentira como forma idónea de gobierno vamos a poner de manifiesto la falta de la verdad existente en este ilusionista de la política siempre que se produzca.

Bermejo podía empezar por dar fe de que RE hace un mes escaso –inmediatamente antes de las elecciones- decía con absoluta rotundidad que mientras él fuera presidente no se trasvasaría agua del Ebro y ahora, ante el pasmo de los regantes del Ebro y el indignado asombro de valencianos, murcianos y andaluces va a autorizar un trasvase del Ebro a Barcelona dándole un nombre distinto al de trasvase, pero llevándose el agua que prometió no llevarse y agraviando a quienes ven cómo por no ser catalanes están condenados a la sed y la ruina.

Este es el Zapatero –perdón, RE- que se dispone a hacernos comulgar con ruedas de molino durante otros cuatro años. Nunca ha sido santa de mi devoción Cristina Narbona y nunca he compartido su política hídrica, pero está claro que no continúa en el gobierno por oponerse a este nuevo embuste de RE.

Lo del mayor número de mujeres que de hombres en el nuevo gobierno me parecería bien si estuviésemos ante el gobierno de los mejores –idea a desechar con presencias como las mencionadas de Bermejo, Maleni y Moratinos o las no mencionadas como la ViceVogue, Soria o el ya rechazado por los madrileños Miguel Sebastián- pero visto lo visto, me temo que estamos ante una capullada más de RE. Un brindis al sol dando la espalda a la galería, es decir, desde las alturas. Un guiño más a una España que ya no contonea las caderas.

Llamativa la presencia de una mujer al frente del ejercito español, aunque esperada y acordada con los altos mandos militares. Es más, me da la sensación de que su embarazo no es casual, sino que –conociendo como conocemos ya a RE- el momento de la concepción fuese fruto de un acuerdo entre el presidente y ella para que asumiese las nuevas competencias en avanzado estado de buena esperanza. Tengo la impresión de que puede ser una buena Ministra de Defensa. Sobre todo en este país que –desde que RE nos sacó de la guerra de Irak- no participa en ninguna guerra. Porque en Afganistán o en Líbano no hay guerra ¿verdad? De esta mujer embarazada, joven, pacifista, licenciada en derecho espero que sea capaz de llamar a las cosas por su nombre, incluso a la guerra. Aunque sea ministra para la cosa militar, ella no está obligada a decirle a RE ante sus mentiras ¡Señor, sí, Señor!

No hay comentarios: