La gilipollez

No sé si habéis caído en la cuenta amigos blogueros del aumento de los accidentes de tráfico en los últimos días. Eso es lo que dicen las noticias que al respecto nos cuentan en los informativos. Posiblemente Antena 3 –me imagino que dentro de su permanente campaña “Ponle freno”) sea la cadena que más énfasis pone en este tipo de noticias, pero lo realmente relevante, bajo mi punto de vista, es el aumento cierto de los accidentes.

No estaría de más que alguna administración –especialmente la que tiene responsabilidad directa sobre este tema, el Ministerio del Interior del omnipresente Rubalcaba- gastase unos euros en hacer un pequeño estudio sobre las posibles causas de este incremento de los accidentes de tráfico. Por ejemplo, que utilizasen la recaudación que obtengan de los radares nuevos instalados en el Túnel de Guadarrama para hacer ese estudio.

Por cierto, ¡valiente gilipollez lo de los radares del túnel! No es por dar ideas, pero ¿se les habrá ocurrido pensar –a los que cobran por pensar en estas cosas- lo que puede ocurrir dentro del túnel? Por ejemplo –repito que no es por dar ideas, sino por explicar la gilipollez- organización de carreras sin límite de velocidad que tengan su salida 50 metros después de entrar en el túnel y su meta 100 metros antes de salir del túnel. Los últimos 100 metros del túnel para hacer tiempo y salir a ojos del radar como si hubiésemos circulado a 100 km/h durante todo el trayecto.

Con esta enorme gilipollez –pensada únicamente para engordar las dilapidadas arcas del Estado- pueden generar muchas más situaciones de peligro, además de unos graves problemas de seguridad y retenciones por los frenazos de quienes llegando al final del túnel hayan caído en la cuenta de que han tardado menos de lo estipulado.

Pero de lo que yo quería hablar era del incremento en los accidentes de tráfico. Que hagan el estudio. No hay quien me quite de la cabeza que la actual situación de paro, empobrecimiento y falta de esperanza para el futuro tienen mucho que ver en estos accidentes. ¿Acaso la prohibición de hablar por el móvil o manejar el GPS mientras conducimos no está basada precisamente en que perdemos atención a la conducción al desviarla hacia la conversación que mantenemos por el móvil o hacia los datos que queremos introducir en el GPS?

Coincide este aumento de los accidentes con la llegada de Febrero, una vez pasado el espejismo económico de las Navidades y el Año Nuevo, una vez que aterrizamos en la cruda y dramática situación que estamos viviendo. ¿Que no nos despista más al volante el comecome de la situación que cada uno esté pasando, que manejar el móvil o el GPS? No lo dudéis amigos blogueros, esto es así.

Ahora, que los que tienen que estar en estos asuntos, están más a justificar el mantenimiento en el cargo de la subdirectora general de Formación para la Seguridad Vial. Vaya perla de subdirectora. ¡Joder que boquita tiene! Después de hincársela a algunos en el 2005 e hincársela otra vez en el 2010, pedirle que le chupe un huevo –esta tiene de todo- en el 2011 a los mismos, me imagino que estará dándole vueltas a la grosería navideña que les va a endilgar en el 2012.

La verdad es que la buena de la mujer –me imagino que es mujer, aunque por su vocabulario parece que goza de otros atributos- lo único que hace con sus emails de felicitación navideña es relatarnos lo que Zapatero hace con nosotros años tras año, ¿o no? Podían ponerla como Directora del B.O.E., así nos enteraríamos bien de lo que significan las leyes y decretos que el gobierno socialista nos aplica.

Ya, ya sé que esto no es muy adecuado. Sin embargo si yo fuese Rajoy, al llegar a la Presidencia del Gobierno no destituiría a esta señora. Le daría un único cometido, pero eso sí, para que lo cumpliese con el mismo espíritu y en la misma línea de sus correos navideños. La pondría a felicitar las Navidades y el Año Nuevo a Batasuna y todos sus repugnantes componentes.